MADRID 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
La delegación de paz del Gobierno de Colombia ha anunciado este lunes que retomará la mesa de negociación con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en enero de 2025, después de la reunión mantenida la semana pasada para reactivar un diálogo que había permanecido congelado varios meses.
"Concluimos con la decisión de dar nuevos alcances a esta tarea de la mesa de diálogo", señala el comunicado, en el que no se precisa en que lugar se celebrará este nuevo encuentro.
Sí hace hincapié en que este nuevo encuentro tendrá como objetivos evaluar el desarrollo de los acuerdos, "introducir correctivos", evitar que se repitan acciones que debiliten el proceso, retomar la agenda de México, evaluar y definir un alto el fuego, así como desarrollar la participación de la sociedad.
El comunicado también destaca los cerca de 30 acuerdos que se han alcanzado hasta ahora, "un acumulado nunca antes logrado en la historia de las conversaciones con esta organización armada rebelde".
"Han sido logros en medio de grandes dificultades", ha dicho el Gobierno que, no obstante, ha reprochado al ELN que haya continuado llevando a cabo ataques tras el fin del alto el fuego que ha costado la vida a "jóvenes soldados" y "a integrantes de la guerrilla", además de todos los problemas que genera a las poblaciones locales.
"Somos conscientes del cansancio de la violencia y del clamor que estos diálogos avancen con mayor celeridad y eficacia (...) sin embargo, esa imperiosa necesidad no debe llevarnos a ceder a la tentación de producir resultados a toda costa (...) nuestra voluntad en persistir en construir el acuerdo más completo", ha apuntado.
El anuncio del Gobierno se produce poco después de un atentado con explosivos contra un destacamento militar en la localidad de Puerto Jordán, en Arauca. A la espera de determinar si el ELN está detrás de estas acciones. La semana pasada, cinco militares murieron en un ataque atribuido a la guerrilla en Antioquia
Un ataque del ELN en septiembre que se saldó con la muerte de dos soldados y dejó una treintena de heridos precisamente motivó al presidente colombiano, Gustavo Petro, a congelar las negociaciones con la guerrilla.
En los últimos días, Petro se ha mostrado dispuesto a retomar un alto el fuego bilateral a fin de poder avanzar en la negociación y evitar así que sigan muriendo "a mansalva más jóvenes con uniforme del Ejército de la Constitución e hijos de trabajadores del país".