COLOMBIA, 24 Apr (EUROPA PRESS)
El presidente Gustavo Petro decidió no renovar el estado de conmoción interior en Catatumbo, establecido hace tres meses, pese a los graves enfrentamientos entre grupos armados que resultaron en 80 muertos y miles de desplazados en esta región del noreste de Colombia. Sin embargo, el gobierno colombiano ha extendido por 90 días once decretos emitidos durante el estado de excepción, incluyendo el incentivo para la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, una medida clave para combatir la financiación de los grupos armados.
El ejecutivo continuará pagando a los campesinos que elijan reemplazar los cultivos ilícitos por otras actividades agrícolas con un subsidio de 1,2 millones de pesos mensuales, aproximadamente 2.300 euros. Esta iniciativa apunta a erradicar 25.000 hectáreas de cultivos ilegales.
Además, se mantienen vigentes otros decretos que aseguran servicios básicos como agua potable y vivienda digna en áreas críticas, apoyo al sector turístico, medidas especiales para las víctimas y una mayor presencia militar. Estas disposiciones cobrarán especial importancia en una decena de municipios del departamento de Norte de Santander, particularmente afectado por esta crisis, incluyendo la zona metropolitana de Cúcuta, y los refugios indígenas de Motilón Barí y La Gabarra, así como otros lugares de César.
Petro decretó inicialmente el estado de conmoción interior y emergencia económica en esta región, rica en recursos minerales y con condiciones ideales para el cultivo de coca, hace tres meses debido a su situación de conflicto. La violencia se intensificó a mediados de enero, con enfrentamientos entre el ELN y el Frente 33 de las disidencias de las FARC, lo cual llevó al gobierno a cancelar las negociaciones de paz con el ELN.