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SANTIAGO, 20 Abr. (Notimérica/EP) -
Los equipos de emergencia han recogido más de 11.000 toneladas de escombros del incendio que hace una semana se declaró en la comuna de Valparaíso, en el sur de Chile, según ha informado este domingo el intendente regional, Ricardo Bravo.
"Hay más de 100 vehículos y camiones tolva que están sacando y retirando material de desecho y podemos decir que a la fecha se han retirado más de 11.000 toneladas de material", ha dicho, en declaraciones recogidas por el diario chileno 'La Tercera'.
Bravo ha explicado que las tareas de limpieza de la ciudad, en las que participan efectivos de Protección Civil y de las Fuerzas Armadas, se están llevando a cabo de noche "con el fin de poder trabajar con mayor tranquilidad y que haya menor peligro para las personas".
El intendente regional ha explicado que, de forma paralela a la retirada de escombros, "se ha establecido un plan de ayuda de capacitación en albañilería, carpintería y otras cosas para 250 personas, con un coste de 377 millones de pesos (676.573 dólares)".
EL INCENDIO
El fuego comenzó en la madrugada del pasado 12 de abril a las afueras de Valparaíso, una de las ciudades más importantes de Chile, pero las ráfagas de viento, que alcanzaron los 40 kilómetros por hora, lo propagaron rápidamente llegando a consumir más de mil hectáreas.
Las autoridades chilenas han cifrado en 15 los fallecidos, en 12.500 el número de damnificados y en 2.900 las viviendas calcinadas, aunque han advertido de que el balance podría aumentar, ya que aún no ha finalizado la evaluación de los daños.
En este contexto, La Moneda --sede del Gobierno y de la Presidencia-- ha declarado "el estado de excepción y de catástrofe" en Valparaíso para favorecer "la evacuación de la población afectada y el control del orden público".
Esta declaratoria ha permitido movilizar a los cuerpos de emergencia y seguridad. En la zona hay ya unos 3.500 efectivos, incluidos 100 militares, junto a decenas de helicópteros, aviones y patrullas.
Además, la presidenta de Chile, Mcihelle Bachelet, ha creado un bono para los damnificados por el que cada familia que acredite esta condición recibirá un millón de pesos (unos 1.800 dólares) para comprar insumos básicos en las tiendas locales.