Publicado 17/03/2025 12:24

Una galaxia de disco 'sorprendentemente grande' en el universo temprano

Esta imagen RGB mejorada de 25 segundos de arco de ancho muestra la galaxia "Gran Rueda" con un corrimiento al rojo de 3,25, un gigante cósmico cuya luz ha viajado más de 12 mil millones de años para llegar hasta nosotros.
Esta imagen RGB mejorada de 25 segundos de arco de ancho muestra la galaxia "Gran Rueda" con un corrimiento al rojo de 3,25, un gigante cósmico cuya luz ha viajado más de 12 mil millones de años para llegar hasta nosotros. - JAMES WEBB SPACE TELESCOPE (JWST)

   MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

   Observaciones con el telescopio espacial James Webb han revelado una galaxia de disco espiral gigante en el cosmos primitivo, tres veces más grande que galaxias similares de la misma época.

   Los discos galácticos son estructuras planas y giratorias llenas de estrellas, gas y polvo que orbitan alrededor del núcleo central. El sistema solar orbita dentro del disco de la Vía Láctea.

   "Observar una galaxia de disco masiva y bien ordenada cuando el universo tenía tan solo 2.400 millones de años nos obliga a repensar la rapidez y eficiencia con la que la naturaleza puede construir estructuras cósmicas", explica el Dr. Themiya Nanayakkara, experto en modelado espectral de galaxias de la Universidad Tecnológica de Swinburne y autor del estudio, publicado en Nature Astronomy.

   Esta galaxia no solo desafía nuestros modelos existentes de formación temprana, sino que también sugiere que entornos densos y ricos en gas podrían ser la cuna de los primeros gigantes del universo.

   Estas observaciones se centraron en una región específica del cielo, que alberga un cuásar brillante con un corrimiento al rojo z=3,25. La galaxia se ve como era hace 11.000 millones de años, o 2.000 millones de años después del Big Bang.

   Utilizando los nuevos datos del JWST de dos instrumentos a bordo, NIRCam y NIRSpec, el Dr. Nanayakkara y su equipo identificaron galaxias dentro de esta estructura hiperdensa y analizaron sus corrimientos al rojo, morfología y cinemática, todos ellos necesarios para la identificación de discos de galaxias.

   Nuestras observaciones condujeron al descubrimiento fortuito de una galaxia de disco sorprendentemente grande en nuestro campo, afirma. La galaxia, conocida como la "Gran Rueda", tiene un radio óptico de alrededor de 10 kpc, al menos tres veces mayor que el predicho por las simulaciones cosmológicas actuales.

   Análisis cinemáticos adicionales basados en los datos de NIRSpec confirmaron que la galaxia contiene un disco que gira a unos 300 km/s. Es más grande que cualquier otro disco cinemáticamente confirmado encontrado en épocas tempranas similares, y sin embargo, es comparable al tamaño de los discos más masivos actuales.

   El Dr. Nanayakkara afirma que el disco se encuentra en un entorno altamente sobredenso, lo que sugiere que dicho entorno podría presentar condiciones físicas favorables para la formación temprana del disco. Dada la falta de galaxias comparables a la Gran Rueda en las simulaciones cosmológicas actuales, es probable que estas condiciones físicas favorables aún no se capturen por completo en los modelos actuales de formación de galaxias. En concreto, se sabe que entornos de este tipo albergan frecuentes encuentros, fusiones y flujos de gas entre galaxias.

   Por lo tanto, para que un disco se formara tempranamente y creciera rápidamente, las fusiones de galaxias en este entorno debieron ser no destructivas y estar orientadas en direcciones específicas. Alternativamente, las entradas de gas debieron haber transportado un momento angular que corrotó en gran medida con el disco galáctico.

   Estudios previos revelaron que el cuásar está incrustado en una estructura a gran escala denominada cúmulo de protogalaxias, que presenta una alta concentración de galaxias, gas y agujeros negros, lo que indica un entorno excepcionalmente denso.

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